Parte fundamental de la integración de una estrategia digital para hacer de un sitio web y de una marca un éxito empresarial, es la labor del SEO. Mucho se habla del “Search Engine Optimization” en estos días pero ¿hasta qué punto, tanto clientes como communitys, publicistas, CEOs, y demás engranajes de la industria, conocen del tema?

Empecemos entonces por definir qué es. Como sus siglas en inglés lo definen, es la optimización de los motores de búsqueda dentro de la web, es decir la utilización adecuada de las herramientas que el sistema ofrece para lograr de una forma eficaz la localización de x o y contenido dentro de la nube. Sin embargo reducir este término a un simple significado literal caería en el error de no abarcar de una forma mucho más profunda lo que este significa.

Dentro de una estrategia digital es necesario vincular diferentes técnicas para mejorar el posicionamiento de un sitio web, entre ellas SEO (Search Engine Optimization) y SEM (Search Engine Marketing); en este artículo nos ocuparemos del segundo, con sus ventajas y diversas opciones.
Para empezar debemos entender qué es SEM (Search Engine Marketing) y cuál es la diferencia con SEO, cuando hablamos de SEM nos referimos a todas aquellas acciones enfocadas en mejorar el tráfico al sitio web, hacer branding, lanzamiento de productos, remarketig, entre otras.